jueves, 7 de octubre de 2010

El Precio del Petróleo en el Presupuesto

Sin duda esta es una variable clave en la discusión de los ingresos presupuestales. Hay que recordar que alrededor de una tercera parte de estos ingresos provienen de esta fuente. Es por eso que durante la discusión, esta variable se vuelve el comodín para realizar cualquier ajuste que evite aumentar impuestos o reducir gasto. pero el ajuste es solo virtual, ya que es un precio estimado que puede ocurrir o no. El precio del petróleo es una de las variables más complicadas de predecir y hasta donde yo se, no existe ningún modelo que haya mostrado ser consistente sistemáticamente. Es por eso que en muchos casos la mejor aproximación es un "random walk" o caminata aleatoria, pero que es de poca utilidad en situación de alta inestabilidad. No obstante, existen esfuerzos para realizar una estimación basada en algún modelo que pruebe ser una referencia relativamente adecuada. Por ejemplo, los chilenos han sido relativamente exitosos en introducir una estimación del precio del cobre basada en un modelo.
En México se introdujo esta opción hace pocos años en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria. La regla utilizada se puede consultar en este post que puse hace un año. Aún así existe un componente que descansa en la opinión de expertos y que le da cierto margen de discrecionalidad a la fijación del precio estimado. Pero al menos existe una referencia útil que debería ser utilizada seriamente por los legisladores. Es en este sentido que cuando algunos analistas señalan que el precio podría fijarse incluso alrededor de 80 dólares porque así lo señalan algunas estimaciones internacionales, me parece que es caer nuevamente en la discrecionalidad que es muy peligrosa. En todo caso, si la estimación que quede en el presupuesto resulta menor al precio realizado, los excedentes se acumulan en los fondos de estabilización, los cuales son también regidos por la ley, no sólo en cómo se realiza la acumulación, sino en cómo se usan los recursos acumulados.
Con esto quiero enfatizar que si no se está de acuerdo con el precio fijada o propuesto por el ejecutivo, la solución no es modificarlo "al gusto del cliente", sino discutir las fórmulas, y los criterios que rigen a los fondos.
Auqnue lo mejor sería discutir seriamente los problemas estructurales de las finanzas públicas y realizar las modificaciones fiscales de fondo requeridas. No podemos vivir siempre bajo un esquema de finanzas públicas petrolizadas....

2 comentarios:

Gabriel Alberto Martínez Roa dijo...

creo que lo mejor que le puede pasar al país es que el petroleo finalmente se termine. ya que tener un ingreso seguro no ha hecho mas que generar incentivos perversos para que el gobierno no trabaje, y lejos de servir para impulsar el crecimiento, ha servido para engordar la burocracia.

Total los mexicanos poco nos beneficiamos de la existencia de Pemex.

Además, es curioso porque hoy que el precio de la gasolina subió, todos se quejan pero nadie lo relaciona con la necesaria entrada de capital externo para revitalizar PEMEX

Anónimo dijo...

El gran problema de la predicción del precio del petróleo recae en la importancia que ésta tiene en el programa presupuestal de cada año. Es claro que no debería de ser tan importante; sin embargo, lo es. Por lo tanto, al no existir un procedimiento teórico-empírico único para predecir su precio, existe un margen de flexibilidad que facílmente se politiza. Es decir, mientras no nos saquemos la lotería cada año y le atinemos al precio o el petróleo deje de ser el eje más importante de los ingresos nacionales, este rubro del programa presupuestal siempre será sujeto a riñas políticas y conveniencias individualizadas.

Alejandro Robinson